Los niños de infantil nada más llegar a clase nos
disfrazamos con las capas de vampiros que habíamos hecho con las familias en clase
y nos pusimos nuestros dientes que al seño nos regaló. Nos hicimos muchas
fotos, primero en grupo y después con todos los compis del cole.
Tras finalizar el reportaje fotográfico los niños y niñas de
infantil de Quéntar y los de Dudas hicimos un taller de cocina. Elaboramos
arañas terroríficas con galletas oreo y regaliz. ¡Estaban riquísimas, no
podíamos parar de comérnoslas!
Cuando terminamos nuestra receta salimos al pasillo y allí estaba
toda la comida que habíamos traído de casa, así que de nuevo nos pusimos a
comer para saborear los frutos del otoño, así como bizcochos y recetas caseras
de esta estación del año.
Después del recreo fuimos a la habitación del terror, donde había
una cueva y telarañas en todo el techo. Allí cada clase contó su historia terrorífica
que había elegido entre todas las redactadas por los niños y niñas. Nuestra
clase hizo el teatro del cuento que nos habíamos inventado todos: “La bruja
piruja”.
Cuando finalizaron los relatos nos fuimos a la clase de los
mayores y estuvimos viendo dos cortos de Halloween de Disney. Por último pusimos
música y estuvimos bailando todos y todas juntas.
Fue un día terrorífico y a la vez superdivertido. ¿Cuándo lo volvemos a repetir?
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