Durante nuestras investigaciones en relación a los Piratas esta vez nos hemos centrado en los mapas de los tesoros que utilizaban los mismos. Lo primero que hemos hecho ha sido pensar cómo eran esos mapas y qué tenían dibujados. Entre todos hemos concluido diciendo que los mapas eran antiguos y de color marrón y que en ellos estaba dibujado un lugar y una cruz que marcaba el lugar dónde se encontraba el tesoro.
Una vez que ya sabíamos cómo eran nos pusimos manos a la obra para hacer nuestro mapa. Comenzamos con darle color y arrugando nuestro mapa para darle aspecto de antiguo, ¡Nos encantó mojar los folios en café y ver cómo se oscurecía!
Al día siguiente al llegar a clase vimos cómo nuestro papel para pintar el mapa del tesoro estaba ya listo, ahora faltaba dibujarlo.
Pero antes de hacer eso salimos al patio para observar nuestro espacio y orientarnos en él, y que mejor manera que con una brújula. Gracias a este invento pudimos ver dónde estaba el Norte, el Sur, el Este y el Oeste. De uno en uno estuvimos orientándonos en el patio e incluso en la calle, y nos dimos cuenta que aunque nosotros nos cambiábamos el Norte seguía estando en el mismo sitio. También aprendimos por donde sale el sol y por donde se acuesta todos las tardes.
Una vez que ya sabíamos orientarnos en nuestro patio nos pusimos manos a la obra para crear nuestro mapa del tesoro. Cada uno/a hizo su plano del patio del colegio y con una cruz marcó dónde iba a esconder su tesoro. Estos son algunos de los mapas.
Finalizados nuestros mapas, de uno en uno salió al patio para esconder su moneda de oro, y una vez que todos y todas escondieron sus tesoros se intercambiaron los mapas y ahora había que buscar el tesoro que el/la compi había escondido.
Fue magnífico ver cómo se orientaron perfectamente y encontraron los tesoros.
¡Qué ricas
estaban las monedas de chocolate!
Sin duda una de las mejores experiencias de este proyecto
Una vez que ya sabíamos orientarnos en nuestro patio nos pusimos manos a la obra para crear nuestro mapa del tesoro. Cada uno/a hizo su plano del patio del colegio y con una cruz marcó dónde iba a esconder su tesoro. Estos son algunos de los mapas.
Finalizados nuestros mapas, de uno en uno salió al patio para esconder su moneda de oro, y una vez que todos y todas escondieron sus tesoros se intercambiaron los mapas y ahora había que buscar el tesoro que el/la compi había escondido.
Fue magnífico ver cómo se orientaron perfectamente y encontraron los tesoros.
¡Qué ricas
estaban las monedas de chocolate!
Sin duda una de las mejores experiencias de este proyecto
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